Las actividades complementarias y extraescolares son clave en la educación, ya que enriquecen el aprendizaje y favorecen el desarrollo integral de los estudiantes. Si estás preparando tu programación didáctica para opositar o actualizando tus contenidos según la normativa vigente, este artículo es para ti. Aquí te explicamos qué son estas actividades, cómo incorporarlas correctamente en tu programación y las claves para adaptarlas a la LOMLOE. Además, analizamos las diferencias entre actividades complementarias y extraescolares, dos conceptos esenciales en el ámbito educativo.
¿Qué son las actividades complementarias y extraescolares?
Las actividades complementarias y extraescolares son herramientas educativas que, aunque pueden ser opcionales, enriquecen el proceso de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes. Ambas tienen como objetivo ampliar la formación académica de los alumnos, pero se diferencian en su enfoque y en el ámbito de su realización.
Actividades complementarias: Son actividades relacionadas directamente con los contenidos del currículo. Se realizan dentro del horario escolar y están diseñadas para reforzar o ampliar los temas tratados en las clases. Ejemplos típicos son las visitas a museos, talleres prácticos o charlas formativas.
Actividades extraescolares: Aunque también tienen una función educativa, se llevan a cabo fuera del horario escolar y suelen ser de carácter más lúdico o recreativo. Pueden incluir deportes, música, teatro o cualquier actividad que permita a los estudiantes desarrollar habilidades sociales, emocionales o físicas en un entorno distinto al aula.
¿Cómo plasmar las actividades complementarias y extraescolares en la programación didáctica?
Una de las claves de una programación didáctica eficaz es integrar actividades que favorezcan el aprendizaje de los estudiantes, y las actividades complementarias y extraescolares cumplen un papel esencial en este sentido. Para plasmar estas actividades en tu programación, es fundamental seguir estos pasos:
- Identificar los objetivos educativos: Antes de incluir cualquier actividad, debes tener claro el objetivo que persigues con ella. ¿Qué habilidades o conocimientos quieres que desarrollen tus alumnos? Esto te ayudará a seleccionar las actividades más adecuadas.
- Vincular las actividades al currículo: Las actividades complementarias deben tener una relación directa con los contenidos del currículo oficial. Por ejemplo, si estás enseñando historia, una visita a un yacimiento arqueológico puede ser una excelente opción.
- Plantear actividades inclusivas: Asegúrate de que todas las actividades sean inclusivas, permitiendo la participación de todos los estudiantes, sin importar su nivel o capacidades.
- Planificar la evaluación: A la hora de planificar, no solo debes incluir las actividades, sino también cómo se evaluará su impacto. ¿Qué indicadores usarás para medir el éxito de cada actividad? Esto es clave para cumplir con los requisitos de la LOMLOE.

¿Cuál es la diferencia entre actividades complementarias y extraescolares?
Aunque los términos «complementarias» y «extraescolares» se usan frecuentemente de manera intercambiable, es importante entender sus diferencias para poder aplicarlas correctamente en el aula y en tu programación.
Actividades complementarias se desarrollan dentro del horario escolar y tienen una relación directa con el contenido académico. Pueden incluir salidas escolares, visitas educativas o cualquier actividad que refuerce los aprendizajes que se están desarrollando en el aula. Su propósito es complementar la enseñanza formal, ayudando a los estudiantes a entender y aplicar lo aprendido.
Las actividades extraescolares son aquellas que se realizan fuera del horario escolar. Generalmente, son organizadas por el centro educativo o por otras entidades y no están directamente relacionadas con los contenidos académicos. En cambio, se centran en el desarrollo personal y social de los estudiantes. Ejemplos de estas actividades incluyen deportes, danza, arte o talleres de emprendimiento.
¿Cómo se regulan las actividades complementarias y extraescolares en la LOMLOE?
La LOMLOE, la ley educativa vigente en España, destaca la importancia de las actividades complementarias y extraescolares para el desarrollo integral de los alumnos. La ley establece que estos tipos de actividades deben estar alineados con los principios del currículo, promoviendo la igualdad, la inclusión y el fomento de valores como la cooperación y el respeto.
La LOMLOE también destaca la importancia de planificar adecuadamente las actividades complementarias, para que refuercen lo aprendido en clase y se integren bien en la programación didáctica. Por otro lado, aunque las actividades extraescolares no se evalúan directamente, deben contribuir al desarrollo personal y social de los estudiantes.
¿Qué aspectos considerar para incluir las actividades en tu programación según la LOMLOE?
Al integrar actividades complementarias y extraescolares en tu programación didáctica, es crucial que sigas las pautas establecidas por la LOMLOE para garantizar que sean educativas y pertinentes. Algunos aspectos a tener en cuenta son:
- Objetivos claros y alineados con el currículo: Las actividades deben estar diseñadas con el propósito de reforzar o extender los aprendizajes de los alumnos según los contenidos del currículo.
- Diversidad y accesibilidad: Las actividades deben ser inclusivas y accesibles para todos los estudiantes, sin importar sus necesidades educativas.
- Evaluación continua: Aunque las actividades extraescolares no siempre son evaluables de la misma manera que las complementarias, es fundamental que se evalúe su impacto en el desarrollo global del estudiante, especialmente en su crecimiento personal.
- Colaboración con otros centros y entidades: Las actividades extraescolares pueden beneficiarse de la colaboración con asociaciones, museos, universidades u otras entidades que enriquezcan la oferta educativa del centro.
Preguntas Frecuentes
¿Cuál es la diferencia principal entre actividades complementarias y extraescolares?
Las actividades complementarias se realizan dentro del horario escolar y están directamente ligadas a los contenidos curriculares. En cambio, las actividades extraescolares se llevan a cabo fuera del horario escolar, con un carácter más lúdico o social, sin vincularse de forma tan estrecha a los objetivos académicos, pero contribuyen al desarrollo integral de los alumnos.
¿Cómo se integran las actividades complementarias en la Programación Didáctica?
Deben diseñarse en coherencia con los objetivos de aprendizaje y competencias que persigues en tu aula. Por ejemplo, si trabajas un proyecto de Ciencias, una salida a un museo de ciencia o la realización de un taller podría reforzar y ampliar esos contenidos, conectándose de forma explícita con las metas curriculares.
¿En qué beneficia la LOMLOE a las actividades complementarias y extraescolares?
La LOMLOE refuerza la idea de que la educación debe ser inclusiva, participativa y competencial. Por ello, la ley promueve que estas actividades contribuyan al desarrollo de competencias clave, la convivencia y el compromiso social, integrándose plenamente en la oferta educativa del centro.
¿Puedo evaluar las actividades extraescolares de la misma forma que las complementarias?
Las actividades extraescolares no suelen tener una evaluación formal igual a la de los contenidos curriculares, pero pueden evaluarse a través de la observación de la participación, la actitud o la adquisición de habilidades sociales y emocionales. En cambio, las complementarias —al estar ligadas al currículo— sí son evaluables en relación con los objetivos de aprendizaje.
¿Cómo me ayuda Tu Programación Didáctica a incluir estas actividades en mi Programación?
En Tu Programación Didáctica, diseñamos programaciones personalizadas que contemplan la inclusión de actividades complementarias y extraescolares alineadas con la LOMLOE. Ajustamos tus propuestas al currículo, definimos objetivos claros y planteamos instrumentos de seguimiento para que su implementación sea coherente y enriquecedora para el alumnado.
Conclusión
Las actividades complementarias y extraescolares son esenciales para el desarrollo integral de los estudiantes y su correcta integración en la programación didáctica es clave para cumplir con los requisitos de la LOMLOE. Al planificarlas, debes tener en cuenta su propósito educativo, su alineación con el currículo y la diversidad de los estudiantes. Implementadas correctamente, estas actividades enriquecerán la experiencia educativa de tus alumnos, favoreciendo tanto su aprendizaje académico como su crecimiento personal.